El grupo hizo un repaso de su disco Dum y también presentó nuevo material.
La noche de viernes que debería haber sido fresca y otoñal, en realidad fue una ceremonia enardecida protagonizada por Dum Chica bajo el techo de The Roxy.
Gente de todas las edades, con looks alternativos, desfilaba por las instalaciones. Algunos bailaban con soltura al ritmo de las canciones que pasaba Sofía Gala Castiglione, la encargada de realizar el warm up previo al show; otros hacían fila en el puesto de merchandising para comprar remeras con el nombre de la banda y el resto simplemente esperaba ansioso con una cerveza en la mano y la mirada fija en el escenario como forma de manifestación para que el grupo saliera a tocar antes de lo estipulado.
A las 22 hs la música se cortó y The Roxy se tiñó de negro y rojo para darle la bienvenida a Lucila Storino, Juana Gallardo y Ramiro Pampin, quienes revolucionaron a su público con “Virna”, el primer tema de la noche.
Acto seguido, la banda repasó algunas de las canciones de su disco DUM (2023), como “Nuevo Ston”, “Veneno” y “Hooky”. Las baterías arrasadoras, los graves del bajo y la voz hipnótica de Lucy se entrelazaban para conformar una performance enérgica y sensual que mantenía a su público expectante y encendido sin poder parar de gritar y saltar ante cualquier hecho que ocurría arriba del escenario.
En la mitad de la velada llegó el momento de las canciones todavía inéditas que formarán parte del próximo disco de Dum Chica. La estrella principal fue “Fax”, pieza que hizo que algunos fans vuelen por los aires entre pogo y pogo, y que además saldrá a la luz la semana que viene.
Hubo una pausa para bajar las revoluciones antes del bis, pero sucedió todo lo contrario porque el público aprovechó para hacer notar su descontento ante la situación actual del país y cantó enfurecido al unísono “Y ya lo ve / y ya lo ve / el que no salta / votó a Milei”.
Fue en ese entonces cuando Dum Chica regresó a las pistas con más energía que antes para dar el batacazo final con la canción “Terremoto”, en la cual todo el mundo, incluida la fotógrafa de la banda, se unificó en una masa pegajosa llena de calor y sudor para gritar con todas sus fuerzas al son de: “Hay tanta suciedad/ Hay restos más ni hablar/ y vos/ terremoto”.