Hadita Cuántica se entrega a su nuevo single, “El plan”, tratando personalmente el desamor y las despedidas.
La esencia íntima y minimalista de Hadita Cuántica es su sello personal. Cantando con el corazón despedazado, deja todo de sí en cada canción donde se abre el pecho para mostrar lo que queda ahí dentro. Una vez más en conjunto con su productora amiga Juana Ruda, la cantante trae “El plan”, una canción sobre saber dejar ir a los amores difíciles.
Un rayo que te parte los huesos
Desde su primer EP, Audios para mandarte (2021), su estilo se definió como haciendo equilibrio entre romántica perdida y melancólica irremediable. Devota del amor, pareciera no poder permanecer impasible frente a esa fuerza destructora. Donde se podría sospechas masoquismo o simplemente mala suerte, Hadita Cuántica parece sospechar el sentido ulterior de ese desencuentro aplazado que es amar. “Pero el amor, esa palabra…”, se debate Horacio Oliveira en Rayuela (1963).
“El plan” está a medio camino entre la carta de despedida y la entrada en un diario. Con un estilo dialógico que achica las distancias hasta esbozar esa última conversación que todos han experimentado, augura un porvenir mejor. “Mañana me vas a ver / y vamos a festejar / que hoy no morimos“, canta sobre una guitarra acústica.
En el gesto de la esperanza se esconde, sin embargo, la dolorosa realidad de un hoy opacado por el dolor. Sin entrar en detalles sobre el cómo ni el por qué de la ruptura que la canción narra, se mantiene suspendida en el terreno de una ambigüedad absoluta, pura forma para que cada uno rellene con sus propias lágrimas.
Tantas cosas en tu cama
Hadita Cuántica toca el punto más bajo de “El plan” con un detalle mínimo que, como siempre, son los más dolorosos. Todo el que haya atravesado un desamor entiende que la herida que nunca se cierra es la de los objetos ínfimos. El amor está en lo táctil. Hay un corpus de elementos de orden epidérmico que irremediablemente hacen al ser amado, o al recuerdo que queda de él. El gesto superficial en la cara, el sonido de una palabra que insistentemente permeó dentro de uno, las manías que pasan desapercibidas hasta para uno mismo.
De todo eso, lo peor está en los objetos que terminamos por asimilar al otro. “Todo objeto tocado por el cuerpo del ser amado se vuelve parte de ese cuerpo y el sujeto se apega a él apasionadamente”, dice Barthes al respecto en Fragmentos de un discurso amoroso (1977), libro que por toda dedicatoria indica: Es pues, un enamorado el que habla y dice. A esta línea, Hadita Cuántica agrega: “Mañana tus cosas ya no estarán en mi cama / te las quiero dar / pero espero que aun conserven mi olor“.
Hay una entrega que va hasta las últimas consecuencias en este despojarse del otro amado. De la misma manera que en su música pareciera reconocer la fuerza con que el amor la arrastra, sabe que es un ciclo finito y que el cierre debe ser llevado no solo con dignidad, sino con el mismo amor que alimentó el vínculo.
“El plan” es otro gesto de amor vencido de parte de Hadita Cuántica. En su búsqueda estética por acercar lo más íntimo de su ser al otro, se muestra indefensa y desposeída. La dulzura con la que canta hace de contrapeso al dolor atroz que la carcome por dentro. Es uno más de tantos gestos mínimos que nos constituyen como sujetos amorosos.
Escuchá “El plan” de Hadita Cuántica y más lanzamientos del 2024 en nuestra playlist de Spotify.