Después de un año y medio sin tocar, y con dos presentaciones de disco pendientes, Silvestre y la Naranja volvió a deslumbrarnos en la atmósfera palermitana.
Quienes ingresamos aquella noche casi primaveral al Hipódromo de Palermo tuvimos el primer acercamiento a la experiencia de Silvestre en la entrada del predio. El auto de la portada del disco Supersticiones, lleno de un humo celeste y con las luces parpadeando, nos esperaba con la intención de ingresarnos de a poco al mundo de la banda. Siendo así una primera impresión visual de lo que el disco trasmite musicalmente: incertidumbre y misterio.
La pandemia había impedido que Animal4s (2019), disco anterior de la banda, pudiera ser presentado. Así que la noche del 18 de septiembre se jugaba la audaz misión de ser la fecha de una doble presentación, con un show que intercalaba entre la luminosidad popera de Animal4s y la propuesta oscura y bailable de Supersticiones.
Las luces LED del escenario se fundieron en un gran destello claro y, ante los aplausos del público ubicado en burbujas, Silvestre y La Naranja subió al escenario para iniciar la noche con la canción que le da nombre a su último disco, “Supersticiones”, seguida del primer tema de Animal4s, “Loco por vos”. Ese juego de coqueteo entre los dos discos fue el péndulo que definió la esencia del setlist del show, alternando canciones de ambos discos, dándole el mismo protagonismo a las dos obras presentadas. El clima del show variaba constantemente en una dinámica bien manejada.
En un momento de la noche, el misterio del detrás de escena de una de las canciones fue revelada por Justo Madero al dedicar y explicar la intención de “Para Felisa“. Lo que muchxs pensábamos que se trataba de una canción romántica, terminó siendo una hermosa dedicatoria a Felisa, la hermana del cantante de Silvestre quien escuchó la canción en vivo por primera vez.
El conjunto bonaerense se dio el lujo deleitarnos con una de los covers del disco Animales: reversiones (2020). Se trató de uno de los hits del gran Charly García, “Promesas sobre el bidet”.
Si la noche hubiera sido un postre podríamos decir que tuvo varias frutillas, las cuales decoraron el evento llevándolo a otro nivel. Algunas de ellas fueron las colaboraciones con las que contó Silvestre y La Naranja: Anyi reemplazó a Esmeralda Escalante en el momento en el que la banda comenzó a interpretar “Canción para que vuelvas”, Zenon Pereyra acompañó gran parte del evento desde los coros y la guitarra rítmica y, como última invitación de la noche, Emmanuel Horvilleur se subió al escenario para coprotagonizar “El instinto”.
La noche finalizó fantástica y energéticamente con “Todas esas tardes”. Luego de hacer el cierre del setlist de la noche, la banda desapareció entre las luces del escenario y los aplausos de un público que no dejó de bailar y agitar el bello momento que Silvestre y la Naranja nos hizo vivir. Siendo el primer evento del conjunto, luego de tantos meses sin poder encarnar lo que las noches musicales de Argentina nos hacen sentir, uno puede reflexionar y citar una de las más famosas frases de Cerati: “tarda en llegar y al final hay recompensa”.
