La música mendocina habló con Indie Club sobre la osadía que significó su último disco (que no por casualidad lleva ese nombre), sus nuevas influencias y su fecha de presentación en el emblemático Xirgu de San Telmo.
El nombre de Eve Calletti resuena en la escena indie desde hace ya unos años, sobre todo desde la destacada colaboración con Simón Poxyran en “Mi vida como vacaciones”. Esta última canción integra la lista de temas del primer álbum solista de la artista: Vintage futurista (2019). Desde allí, su música encontró mayor lugar en Buenos Aires y en distintos recintos de la ciudad donde tocó en vivo.
Hace unas semanas, Eve lanzó su segundo material discográfico, Osadía. Su estilo toma un rumbo propio y destacable, diferenciándose de sus anteriores trabajos. “El disco es una gran osadía en sí”, define la mendocina y agrega: “Tiene composiciones propias en inglés, porque me considero hija de Britney Spears, de Christina Aguilera, del pop y de MTV; pero también hay mucho trap, hip hop y r&b. Es como una gran ensalada de géneros y fue un desafío”.
Este sábado 9 de octubre será la oportunidad ideal para conocer en vivo el tracklist de Osadía en Xirgu (Chacabuco 875, CABA). En el escenario la acompañarán Teo Lif (teclados), Jony Chacón (batería), Juan Julián (bajo), Tomas Sanguinetti (guitarra) y Luciano Madia (trompeta); además de Mora Navarro y La Valenti como músicas invitadas.
¿Qué te aportó la ciudad en este último momento, tanto a vos en lo personal como musicalmente?
Vivo en la ciudad de Buenos Aires desde enero y siento que viví un montón de experiencias. Es un cambio muy grande dejar de vivir en Mendoza y pasar a la city. El intercambio que hay es muy sarpado, hay mucha información de lugares para tocar y también conocí gente que está en la misma que yo. Pensando en el disco, siento que no aportó mucho porque ya lo tenía trabajado desde antes y acá sólo terminé cuestiones de la mezcla o el máster.
¿En qué momento compusiste Osadía?
En la segunda fase de la cuarentena, porque en la primera todos estábamos recalculando sin saber qué pasaba con el mundo. Cuando entendimos cómo eran las cosas y cómo seguir las instrucciones, ahí empecé a componer. Cuando tuvimos más libertad para salir, pude volver al estudio y trabajar las ideas en conjunto.
Pensando en esa situación que nos tocó de cerca a todos, y también en el nombre del disco, ¿qué es una osadía para vos?
Mi osadía más grande es el disco en sí. Busqué irme por el lado del flamenco y me animé a encarar un género que no pertenece ni siquiera a mí país. Solamente lo hice por el gusto de cantarlo y por lo que me transmite el género. Pude cantar hasta en inglés, porque me considero hija del pop, de MTV, de Britney Spears y de Christina Aguilera, entonces siempre canté en inglés pero nunca había armado una composición en ese idioma. A eso le sumé hip hop, r&b y se convirtió en una ensalada de cosas, en una mezcolanza. Osadía es buscar que todo eso se fusione y que quede bien en un solo proyecto.
Se aprecia mucho la armonía entre todos los géneros que fusionas en Osadía, ¿cuáles nuevos artistas sentís que te influenciaron en esta búsqueda?
Hace ya unos años escucho mucho a Kali Uchis o Paloma Mami. Pienso en las personas que viven en Latinoamérica y que por un colapso en su país van a vivir a Miami. Sus hijos nacen ahí, son hijos de la inmigración, entonces van a tener dos idiomas madre: el de sus padres latinos y el de su contexto. Siempre escuché a esos artistas cantar en dos lenguas distintas y me encantaba; ahora decidí hacerlo yo, me di el lujo de fusionar idiomas, y para mí el inglés es como cantar en cursiva y el español es en imprenta. Este último tiempo escuché mucho a Nathy Peluso, C. Tangana, Dellafuente, Rosalía, escucho muchas listas y me pongo a investigar. Soy una gran melómana.
El estilo que hacés en este álbum se aparta de lo que suele llamarse “el indie mendocino”, ¿sentís que es así?
Si, porque ya a esta altura no me siento parte de ese indie, sobre todo con Osadía. Ahora con las nuevas canciones me voy del margen de lo que es el indie mendocino. Le tengo mucho cariño a ese estilo, porque es una época y todes estábamos re en una queriendo hacer música. Entonces es el reflejo del inconsciente colectivo mendocino.
Imagino que una osadía también es animarse a sacar un disco en época de sencillos, ¿por qué decidiste apostar al formato álbum?
Porque yo era una artista muy del single y ahora quería apostar por un trabajo más grande, con más canciones y más peso. Vintage futurista es mi primer disco pero es un EP, luego saqué “Corazón”, “Lento” y “Adrenalina” y ya era hora de editar un material más conciso y con más historias para contar.
¿Cómo fue componer y grabar con Mora Navarro y Clara Cava?
Fue una delicia, las amo mucho y son mis amigas. Nos juntamos en mi casa, les mostré cómo venía el tema y nos pusimos a armar las partes entre las tres. Cada una armó su letra y su melodía y salieron varias versiones. Fue todo muy natural y rápido, a ellas les tengo mucha confianza y me siento cómoda; así que puedo probar cosas sin vergüenza.
¿Cómo nació el arte de tapa?
Primero pensamos una idea en base al concepto del disco y después nos pusimos en búsqueda de los elementos para la foto: una katana, la balanza, el corazón, el vestuario. Básicamente fue un quilombo hermoso que dio como resultado un trabajo muy en conjunto.
Se viene la presentación oficial del disco en Xirgu, ¿qué más tenés pensado a futuro?
Sí, voy a presentar el álbum el sábado 9 de octubre en formato banda completa, lo cual es un gran desafío porque hace dos meses venimos ensayando para poder darle forma a los temas. Tuvimos que trasladar toda la producción a seres humanos tocando instrumentos, que no es para nada fácil. Ese show es como mi cumpleaños de 15, estoy invirtiendo toda mi energía y dinero. Tengo pensado luego hacer una pequeña gira y también filmar algún videoclip.
Eve Calletti presentará su disco Osadía en Xirgu (Chacabuco 875, CABA) el próximo sábado 9 de octubre a las 20hs. Las entradas están disponibles desde $800 en la web de Passline.