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Camila Buch estrenó su primer álbum “Otra manera”

La ópera prima de la cantautora trata de una articulación de géneros diversos como afines. Un recorrido sonoro que termina en el indie pop pero es alcanzado por dos raíces marcadas: jazz y r&b.


Otra manera es, como bien se define, un outside, una alternativa y, por consecuente, también una incógnita. No es irrelevante reconocer la incertidumbre como una diagonal que atraviesa las ocho piezas de este material de Camila Buch. Porque hacer algo de otra manera conlleva, ante todo, no saber, desconocer e incluso desaprender. Si bien entre el año pasado y éste se publicaron cinco canciones como anticipo, la salida final del álbum implica integridad.

Abre el registro su canción homónima que, desde el vamos, llama a exhortarse de toda neutralidad, salirse del confort. El beat que marca el pulso arremolinado como una emoción recién despierta y esa lírica que busca tacto para encontrarlo. Un constante roce de expectativas parece quedar flotando en un clímax urbano con guitarra flamenca.

Entrando en la lista de reproducción llega “En una”, colaboración con Mora Navarro. Canción que cumple un año de lanzarse y que es, probablemente, el marco narrativo de la obra toda. Poniendo en loop una sensación de aterrizaje, se va dibujando un paisaje de soledad que adopta las inseguridades sin el rigor de resolverlas y encajar. Además, está acompañado de un videoclip con una performance tan íntima como enternecedora para plasmar la óptica del inside.

Con “Los viernes” se podría empezar a hablar del adentro del álbum. Un pop con matices de bolero que encanta y desgarra con la colaboración de Mel Muñiz. Se erige como síntesis de lo que fue y de un ayer que no vuelve pero tampoco queda quieto. Una melodía que se aloja en el diafragma y separa la tensión de lo que relaja a través de una lírica que, en primera persona, se va relatando entre recuerdos y cambios.

Podría ser así que, con “El portal”, y a la mitad de la reproducción, el semblante es otro. No el que se quiere sino el que se puede, un vaso que contiene lo que alcanza para la sed que deja el decir lo que atraviesa. Esencialmente pop, una medida ideal para mover los hombros que te deja cerca de un abrazo. Hasta acá sería correcto echar luz a los metamensajes que acercan una conciencia a la importancia de la salud mental. La importancia de tener procesos tanto solos como acompañados y a escapar de la autocondición que ejercemos a partir de las relaciones con otros.

En “La culpa” bien funcionaría como introducción un comentario en YouTube que dijera “Si me lo mostró el algoritmo es por algo“. Se trata del tercer corte con videoclip que, además, presenta una voz teñida por el autotune que le brinda una virtualidad reverberante. Destila cierta oscuridad, como una intromisión que adopta el carácter de epifanía para dejar a la vista la ambigüedad de pensar en lo que pudo ser, algo idealizado o sesgado de control. Se puede sentir, percibir, el azar sobre el final de la melodía donde una cadencia seductora deja la voz sola como un pensamiento recurrente.

En el cierre, “Plaza Mafalda” representa el aspecto más concreto de Otra manera. Camila Se aleja de las concepciones abstractas que iban presentando escenarios mentales como emocionales. Se apuntala un espacio físico y abierto, una exterioridad que se extiende como un parque en el cual ya no dar vueltas en círculos sobre lo mismo. En coincidencia sucede también el videoclip, segundo corte visual de lo que será el vídeo-álbum final que aún no tiene fecha de estreno pero está pronto a salir.

Casi al fin de la cola llega “Volver al centro”, un r&b que recula el presente, una voz dominante y al frente que empieza a destilar residuales de una historia incierta a la que no le alcanza con cerrar la puerta. El final de esta reproducción llega con “Ya no hay dudas” en feat. con Los Otros Días, algo digno de un cortometraje, de una película de esas que vienen bien un miércoles. Un poco de melancolía pop que conquista los rincones donde no se acumula la ansiedad.

Camila Buch se destaca por mantener una línea creativa muy abarcativa. Anula en todo sentido aquella frase hecha que sentenciaba que el que mucho abarca poco aprieta. Este es un disco que aprieta, que agarra fuerte pero también sabe de soltar.


Podés escuchar Otra manera de Camila Buch y más lanzamientos del 2023 en nuestra playlist de Spotify.

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