Ni Daenerys, ni Cersei, les presentamos a la verdadera reina: Marilina Bertoldi.
La artista es la segunda mujer (además de Mercedes Sosa) en conquistar el Gardel de oro al mejor álbum del año. “Hoy lo gana una lesbiana”, dijo ante los llantos de emoción de su familia y amigues.
Prender un fuego, que ya había obtenido el premio a Mejor disco artista femenino de rock, quedó así en lo más alto del 2019. Fue grabado y mezclado por Brian Taylor, quien afirmó que Marilina “lideró la producción de su disco”. A su vez, la cantante reconoció que el productor “no se animaba a hacerlo, y al final sucedió”.
Durante el discurso que brindó en Mendoza, la artista no olvidó mencionar los oscuros antecedentes del galardón. “El rock, para mí, trasciende el género, es asumir la responsabilidad de tener un micrófono en frente y decir lo que se tiene que decir”, había dicho al recibir ya el premio a Mejor disco de rock de una artista femenina. Al recibir el oro, amplió: “Estuve haciendo investigaciones sobre esto, la única persona que no es hombre que ha ganado este premio es Mercedes Sosa, hace 19 años”.
“Cuando yo era chica, para mí estos premios eran imposibles”, continuó Bertoldi, “siento que hoy en día se está haciendo un esfuerzo para federalizarlo, el siguiente es entregarlo a una mujer (…) sobre todo lo festejo como un artista nuevo, que viene a decir algo distinto”.
Finalmente, la ganadora de mejor disco 2018 agradeció ser premiada tan joven, y pidió: “Dennos estos lugares que vamos a cambiar la música, vamos a acercarle a la juventud que es lo que hace falta para estos premios que están un poco olvidados”.