A pesar de las dificultades, 1915 supo dar un show innovador a través de streaming para presentar Los años futuros. Charlamos con la banda al respecto de esta nueva modalidad.
Siempre activos y buscando nuevas formas de hacer presencia, 1915 se presentó durante la noche del sábado con un show por demás innovador. Tras una serie de vivos que realizaron durante la cuarentena (sus “mil nueve lives”), la banda dio un paso más allá y montó una presentación en la que confluyeron el recital de los viejos tiempos con las posibilidades que las tecnologías del distanciamiento abren. El show no fue una presentación sin más. Luego de lo que fue el lanzamiento de Los años futuros, también de manera digital, podría decirse que este show fue el gran debut del último disco de 1915.
Cada día más, los “vivos” y streamings se vuelven parte de la rutina y no queda otra alternativa a los artistas para mantener el contacto con su público. En la búsqueda de un formato que permitiera extenderse por encima de la impersonal barrera de las pantallas, el grupo dio con una forma de ofrecerle al público algo más de lo que podría encontrarse en cualquier recital subido a internet. De esta forma lograron ofrecer un espectáculo fresco e innovador a pesar de las limitaciones.
“Si bien teníamos muchas ganas de tocar y hacer un show como en los viejos tiempos, entendemos que no son los viejos tiempos y hoy por hoy para ver un recital en vivo no hace falta pagar una entrada. La mayoría de las live sessions o recitales grabados de la historia están disponibles de manera gratuita en los canales de los artistas. Queríamos proporcionar algún valor agregado para la gente que se bancó pagar una entrada en un momento económico tan jodido”, comentó Alejo Freixas, bajista del grupo.
Qué bueno volver a vernos
El show comenzó con la nostálgica iluminación del escenario que descubre a la formación lista para comenzar a tocar. Repasando los mejores temas de Bandera (2018), el grupo se mostró más graciosos que de costumbre en sus comentarios entre tema y tema: “¿Cómo anda la gente del otro lado?”, saludó Cruz Hunkeler entre risas al finalizar “Prisma”. La primera novedad aparecía: una línea telefónica a la que enviar mensajes de voz y fotos. Los aplausos festejando las canciones fueron reemplazados por audios alentadores y vitoreos que llenaban el vacío entre temas.
Mensajes de voz, fotos del público en su hogar y videos de covers se sucedían gracias a este canal que abrió el grupo para llenar las ausencias. Personalidades del indie no dejaron de hacerse presentes y hasta Goyo envió un video pidiendo que toquen “Paranoico”, su tema favorito de Los años futuros. Aprovechando las posibilidades de su condición audiovisual, reprodujeron un video de las madres de plaza de mayo antes de interpretar “Enemigo” en consonancia con el recién pasado día de la identidad y su compromiso político siempre latente.
Aún en la distancia, siempre bien acompañados
Hacia la mitad del show, el grupo bajó del escenario para tomarse un receso. Tras un corte de cámara, reaparecieron en una suerte de descanso para protagonizar una divertida trivia conducida por Matzorama. El ambiente era ameno y se los sentía cómodos y divertidos mientras ventilaban intimidades entre sí y contaban anécdotas. Para terminar el interim, interpretaron una versión acústica de “Paranoico”.
El regreso de 1915 al escenario trajo sorpresas y, para el debut en vivo de algunas canciones pertenecientes a Los años futuros, contaron con la participación de Feli Colina. En compañía de la artista interpretaron “Extranjero” y un cover de “Adela en el carrusel”, de Charly García.
Para cerrar la noche, luego de aproximadamente dos horas de show, el grupo se despidió agradeciendo al público con unas palabras sobre el significado del título de su disco. “Los años futuros” y “Policía” fueron los últimos temas que tocaron antes de despedirse.
Nuevas formas de mantener el contacto
Lo que fue el show de 1915 significa mucho para la difusión cultural en la actualidad. En un contexto que impide las reuniones y fuerza al encierro, la situación cultural se convirtió rápidamente en un páramo de no ser por propuestas de este estilo. La búsqueda de un nuevo formato que permita superar las dificultades es condición fundamental para que la escena musical no pierda el impulso tan fuerte que viene tomando desde hace años. Así con todo, realizar el show supuso una serie de dificultades que encontraron alivio en las facilidades de la tecnología.
“Los silencios entre tema y tema tenía que ser llenados por nosotros porque no iba a haber aplausos, la gente no iba a tener tiempo para conversar entre ellos porque, en definitiva, no hay nadie mirando el show en el lugar físico. Antes que dejar silencios queríamos que hubiera audios de la gente o videos con saludos de amigos, o nosotros mismos distendiendo el aire que de por sí fue un poquito tenso por ser la primera vez que nos la jugábamos con algo así. Estuvimos probando cosas hasta diez minutos antes de empezar el stream”, comentó Alejo Freixas.
El valor para apostar por una propuesta nueva e innovadora tiene mérito propio más allá del éxito que supuso. Es por demás meritorio el esfuerzo de 1915 realizó para sortear la dificultades de la cuarentena y lograr presentar algunos temas de Los años futuros en conjunto con distintas amistades de la música y distintos medios audiovisuales.
Podés escuchar Los años futuros y más de 1915 en Spotify o a continuación.