Tras algunos inconvenientes que obligaron a reprogramar parte de su gira de verano, BACH presento Paranoia Pop en el Hipódromo con doble función al borde del sold out.
El pasado domingo 7 de marzo la banda oriunda de Beccar visitó por fin la ciudad de Rosario en el marco de su gira por las ciudades capitalinas cercanas a Buenos Aires. Tras algunos inconvenientes que obligaron a reprogramar parte de su gira de verano, BACH presento Paranoia Pop en el Hipódromo del Parque Independencia con doble función al borde del sold out.
Si algún temor rondaba a les presentes en cuanto a como afectaría la nueva normalidad de distanciamiento social a un show de Bandalos Chinos, podemos afirmar que eran miedos infundados. La magia está intacta, e, incluso, aún en estas condiciones, la energía que siempre tuvieron como grupo se vio potenciada al tener que salvar la distancia física con el público.
La fecha compuesta por dos funciones consecutivas, ya había agotado la totalidad de los tickets disponibles. Con la reprogramación llegó una reubicación que permitió poder ampliar la capacidad, ya que se contaba con más espacio al aire libre. El escenario fue ubicado a la izquierda de la tribuna central, mirando hacia el oeste del lugar. Frente a él se ubicaron las columnas con burbujas de 2 y 4 personas. Un cielo semi nublado enmarcaba una noche ni fresca ni calurosa, casi ideal si no fuera por la molesta presencia de los mosquitos (sí, otra vez sopa).
Cada uno de los shows comenzó puntual, y duraron alrededor de una hora y media. El repertorio incluyó 20 canciones, haciendo un repaso de los temas más populares de su discografía. Comenzaron con “Paranoia Pop” y “Mi manera de ser”. Siguieron con “Super V”, a partir del cual fueron intercalando temas de sus dos últimos álbumes: “El club de la montaña”, “Lento”, “Sin señal”, “A la cabeza”, “Chu-chu”, “La herida”, “El ídolo”, “Tema de Susana”, “Departamento” y “Demasiado”.
Durante la segunda presentación, Goyo contó al público que durante el show que dieron en Córdoba sufrió un leve esguince, del cuál pudo recuperarse parcialmente para las 4 funciones que le restaban. Si bien mostró buen ánimo y no dejó ni por un segundo su papel de showman, pudo notarse que se manejaba con mucha precaución arriba del escenario.
El cierre, que históricamente están cargados de mucha participación del público y mucho baile por parte de Goyo, no fue la excepción en este caso. Tras interpretar “Isla” y “Dije tu nombre”, dejaron el escenario.
El público rosarino, que es bien conocido por ser muy manija, comenzó a agitar con cánticos alusivos y palmas para que regresaran. Lo hicieron: fue un falso cierre. Cuando comenzó a sonar la Intro de “Vámonos de viaje”, estalló todo. Finalmente hicieron la esperada “El temblor” que, tras estirarla, engancharon con el estribillo de “Paranoia Pop”: “Baby, esta es mi mentira“.
En definitiva, la presentación del disco por estos lares fue un rotundo éxito. A pesar de las condiciones no bajaron ni por un segundo la vara, al punto de que fue imposible no bailar aunque sea manteniendo el lugar en el asiento.
Un detalle muy destacable es que una vez finalizado, musicalizaron “You Should Be Dancing” de los Bee Gees. Era realmente impresionante como la gente se retiraba ordenadamente sin dejar de bailar disco. Definitivamente fue un encuentro para recargar el cuerpo y el espíritu de energías para encarar las incertidumbres que nos aquejan en estos tiempos.
