En el marco del Festival Mutante, Lupe se explayó sobre cómo se prepara para la fecha y los proyectos que se vienen.
El Festival Mutante prepara su segunda edición para el 9 de julio en el Complejo C Art Media, Ciudad de Buenos Aires. El evento, que busca brindar un espacio y celebrar a lo independiente, combina tanto a artistas clásicos como a nuevas propuestas que la vienen rompiendo.
Esta edición cuenta con un lineup variado: desde la emblemática guitarra de Juana Molina, la experiencia solista de Santi Motorizado y los clásicos indie de Las Ligas Menores hasta lo más disruptivo de la mano de Fermín y, por supuesto, Lupe.
La artista argentina produce sus propias canciones, lanzó cuatro EPs hasta la fecha y está trabajando en su primer disco. Charló con Indie Club sobre su participación en la edición del Festival Mutante de este año, el proceso de creación de su próximo lanzamiento, qué la inspira y más.
– ¿Cómo vivís tocar en el Festival Mutante?
Lo vivo como algo re lindo, de hecho al ser independiente y trabajar basándome en lo que va apareciendo, que esté en este festival en la mitad del año me significa algo re estimulante y re lindo, porque es una forma de participar de algo lindo que me interesa, con artistas que admiro, de forma linda, bastante prolija. Me cerró por todos lados y me parece que también la propuesta que tiene para la persona que viene a ver el show está buenísima porque hay distintas sonoridades y me pone contenta que realmente haya una presencia de la diversidad desde el nombre hasta la mixtura de sonidos. Además, volver a acercarme a ese entorno más indie es re lindo.
– ¿Tocar en un festival como el Mutante a mitad de año también te nutre de nuevas ideas?
Sí, me pone en movimiento artístico, sobre todo en este momento de terminar un disco. Me hace salir un poco del estudio y me pone en movimiento artístico, físico, mental y me pone en contacto con la cultura.
– ¿Nos podés dar algún adelanto de lo que tenés pensado para el show? ¿Estás trabajando en algo que vas a tener pensado mostrar más adelante?
Es la síntesis de todo lo que estoy haciendo estos últimos dos años con el show, tocando los temas que tengo hasta ahora, pero de una manera bastante power. Creo que es quizás el último show antes de sacar mi nuevo disco. No quiero tocar temas nuevos que todavía no saqué, porque siempre voy paso a paso, va a ser como una especie de cancionero megamix potente.
– Adelantaste que se viene nuevo disco, ¿cómo vas con eso?
Está en proceso de postproducción y mezcla. Estuve tres años produciendo e hice 300 tracks. He pasado noches y noches viendo los distintos tracks sin saber cómo reducir y quedarme con los temas. Así que este disco es una especie de síntesis de todo ese camino, y un cierre actualizado a hoy.
– Con 300 tracks, ¿cómo fue el tu proceso de recorte?
Estuve a punto de hacer un disco de 50 temas. Primero fue un disco instrumental en el cual investigué de la sonoridad a partir de una máquina de ritmos del ’98 y después busqué las letras. Seleccioné qué es importante para mí: movimientos, espacio, ambient, lo que quiero decir. Es un proceso súper emocional y desprolijo.
– Siempre te involucras en el proceso de producción.
Re, lo produzco todo sola, tengo el estudio en mi casa. Trato de tener una rutina porque sino estoy todo el día haciendo eso. Todo el proceso haciendo música, es como terapia diaria, me encanta y me da libertad, para mí es natural en mi proyecto. Pero también entiendo que al hacerlo se le da visibilidad a la idea de que no siempre es una persona varon hetero cis la que está produciendo.
– Pasó bastante tiempo desde el último EP. ¿Hay sonidos nuevos, estás produciendo desde otro lado?
Fue interesante, soy medio old-school y me encanta el formato del disco largo. El disco Nuestra Forma, que hicimos con Djs Pareja, me encantó pero fue más cortito. Me acercó a nuevas posibilidades y también nuevas sonoridades.
En el disco nuevo eso está presente, la libertad en la forma de cantar. Está toda mi parte punk y mi parte suave, viva. Hay algo melancólico y ambient mezclado con el movimiento, tiene un poco de todo.
– Es una aventura.
Es una aventura a nivel psicológico y emocional, porque es un disco donde trabajé muchas cosas en las letras que tienen que ver con las pasiones personales, pero no es un lugar individual, sino por las cosas que me atraviesa a una persona.
Traté de dejar esas cosas que para mí significan algo, pero que también pueden tener significado para otra persona.
– ¿Vamos a poder ver los 200 y pico en algún sitio?
Tengo la idea de generar una estructura que me permita intuitivamente y libremente lanzar esas ideas cuando tenga ganas. Capaz los mejores 20 tracks que quedaron afuera.
Cuando hice Un número y “Te amo” quedaron dos discos en el camino. Creo que ya es parte de mi proceso artístico.
– ¿Tomás el investigar nuevos sonidos como un juego?
Absolutamente, es mi aventura personal, mi movimiento mental, trato de ejercitarlo y de estimularme. Cuando viajé el año pasado a Europa me di cuenta que el sonido underground estaba arcaizado, más lento, latino, por ejemplo. Por más de que eso me parece súper interesante y lo absorbo en alguna forma no necesito copiar una sonoridad, sino ver de qué manera estoy en contacto con eso.
– Por último, ¿qué te parece que es el indie o qué representa para vos?
En un momento me quise distanciar porque sentí que se había convertido en un sello de una sonoridad particular. Por ejemplo, en las guitarras con chorus. Para mí el indie era el indie rock.
Necesitaba buscar mi sonido, algo que no sé si tenía nombre. Ahora pasó un tiempo y pienso el indie como el trabajo independiente, me puedo entender como un artista indie sin la necesidad de pensar que hago indie rock, me volví a mirar con el término.
Incluso hablando con gente de otros países. Hice un feat con Yung Prado, un artista barcelonés, que va a salir en un mes. Él hace música muy buena, mayormente electrónica. Y pensaba, en realidad somos todos artistas independientes también tiene que ver con la libertad, al igual que los medios indie en su pensamiento.