Al ritmo de la vida, Julieta Rada, 1915, Emmanuel Horvilleur y Lo’ Pibitos cerraron la primera edición de un festival que asegura tomar la posta de los primeros Buena Vibra.
Afuera, en las calles, se respiraba un clima de celebración. La ciudad, teñida de seis colores, festejaba el orgullo y la diversidad. Adentro, la CC Konex, también.
La tarde las tenía todas para hacerlo. El sol sobre el patio, las máquinas de arcade encendidas, la mesa de ping pong ocupada y un line-up prometido.
El primer turno lo tomó Julieta Rada. La cantante, hija del músico y compositor Rubén Rada, salió al escenario con “Sencillo”, el corte de difusión de Bosque, su último disco —publicado en agosto de este año—. De a poco, el público se dejaba conquistar por el groove de la guitarra. Le siguieron “Bosque” y “Stevie”, junto a Mia Folino y Abril Olivera.
A medida que el show avanzaba, el patio del Konex se iba colmando de cada vez más gente. Para “Corazón diamante” les espectadores ya se habían soltado y se animaban a bailar y tararear las canciones.
En “Visionarios”, Rada instó a les presentes a que la acompañen: “¿Quieren cantar? Les paso el coro, ¡es muy fácil!”. Y terminó con “Antídoto” y “Malísimo”, de su padre Rubén.
Tras un breve descanso, donde la gente aprovechó para distenderse y pegarse una vuelta por los stands que se encontraban alrededor de la escalera central, llegó el turno de 1915.
Los liderados por Cruz Hunkeler arrancaron con “Canción de bolsillo” y continuaron repasando el material de su último disco, Bandera (2018), junto con la presentación de parte de su nuevo material. “Estamos haciendo un nuevo disco”, lanzó el cantante antes de interpretar “Llamando”, uno de los adelantos de lo que será la nueva placa esperada para el 2020, de la que también hicieron “Extranjero”.
“El último, pero cantenlo, loco”, exclamó el cantante antes de dar paso a la rápida entrada de “Policía”, donde cambiaron la letra por “El titular/Es casi igual/Porque lo escribe Patricia Bullrich”, haciendo estallar el fervor del público.
El tercer tiempo fue de Emmanuel Horvilleur. Con el sol en el ocaso, el ex Illya Kuryaki agradeció a les presentes por haber venido y comenzó con “Welcome”, el primero de Xavier (2019), su último disco tras el impasse de nueve años desde Amor en polvo (2010). Continuó con “En el aire” y le siguió “El hit”: “El primero que inició este camino hace ya dos años”, expresó Emma.
El punto alto llegó con “Llamame”, clásico de Mordisco (2007), donde el cantante se calzó la electroacústica y el Konex lo acompañó a viva voz en el estribillo. Siguió con “No como”, de Rocanrolero (2005) y “Amor loco”, donde invitó al escenario a Julieta Rada.
“Que tengan un lindo fin de año, más noches así en su vida y disfruten a Lo’ Pibitos”, dijo Horvilleur antes de despedirse con “Radios”, donde la banda se quedó tocando sola y de a une se fueron despidiendo del escenario.
Con un cielo estrellado, Lo’ Pibitos hicieron estallar la fiesta con “Anda corriendo el rumor”. La siguieron repasando los éxitos de En espiral (2018) y A punto caramelo (2015), como “Quien soy” y “Envión”.
“Está buenísimo que hayan venido para acá con lo difícil que está todo, que hayan podido pagar su entrada, lo valoramos mucho. Y también celebramos la diversidad, hoy que es la marcha del orgullo”, expresaron antes de lanzarse a bailar con su público en “Está en ti”.
El cierre quedó a cargo de “La rubia tarada”, “Nada que ver” y “Yastá”, donde hicieron pasar a todes les músiques invitades, que se despidieron al ritmo de las congas mientras la gente comenzaba a salir.
📷 Soledad Díaz