
Lichi y su “¡Cocoliche!” en Niceto: todos los colores a la vez
El artista presentó oficialmente su ultimo disco en Capital, una aventura donde la imaginacion y la búsqueda son lo principal.
Un domingo de lluvia no puede tapar las celebraciones. El día predilecto de la semana para los bajones, la soledad, la tristeza hecha jornada. Un día así Lichi presentó en Niceto Club junto a su banda oficialmente su disco ¡Cocoliche!, un universo que ilumina y colorea un domingo de lluvia.
Oriundo de Rafaela, Santa Fe, el año pasado sacó su primer LP que plantea desde cuestionamientos musicales hasta una imaginación sin restricciones. Vivo desde las paletas musicales, experimental sin ser pesado, tan característico como original. Partiendo desde este punto, el día se prestó para una fiesta: al fin y al cabo, ¡Cocoliche! celebra muchas cosas.
El artista y el disco van más allá de la psicodelia, sería muy plano dejarlo y encasillarse en ese lugar. Este disco es un grito que va más allá de lo individual y en el vivo se vio esa característica. Algo así como una ceremonia. No se puede hablar de ¡Cocoliche! ni Lichi sin hablar de la identidad, de la búsqueda en uno mismo

Shoosh, también de Rafaela fue la apertura de la noche. La banda liderada por Lilu Galetti y Roli Guevara combina el dream pop con la fuerza del garaje y últimamente están tocando su EP Suena raro, donde reflejan este sonido que combina crudeza y fantasía melódica.
Su show fue una recarga de energía para el lugar mientras el público empezaba a llegar a Niceto. Mucha energía y ritmo para canciones como “Lugares” o como lo nombró Galetti: “El que más le gusta a la gente”. Destellos de guitarra indie y ese tipo de melodías dulces pero que va cambiando mientras corre el tema. “Desde el campo a la ciudad para ustedes”, cerrando Shoosh cerró on “La cura”.
La previa era musicalizada con música a tono, rock setentero que te transportaba no a otra época, sino a otro lugar, a otro pensamiento. Hay espera, muchas ansias por escuchar en vivo ¡Cocoliche!. A un año de su salida, una excusa muy buena para la presentación del disco en Niceto Club, una victoria frente a lo instantáneo de la realidad, donde todo tiene que ser rápido.
Todas las figuras a la vez
A falta de quince minutos para las diez de la noche, Lichi salió con su banda conformada por Clara Lambertucci en el bajo, Nicolas Manikis en guitarra, Lucio Sanchez en teclados, Efe en guitarra acústica y Santiago Axis batería.
No parece la presentación de un disco, sino un acto para la música de Lichi. No es alguien que toque con demasiada asiduidad, lo que hace especiales este tipo de presentaciones más largas. Arrancaron con “EFECTO 17”, un single de 2022, pero que a la vez es una gran entrada para este mundo que por fases es lisérgico.

La pantalla de atrás se llena de colores y aparece el Pokémon ya característico de Poliwhirl e inicia “Carameloraro”, una referencia a ese mundo que lleva al siguiente nivel a la noche. Después, Lichi se paró solo en medio del escenario para hacer “Mi yo y mi mini-mi”, sumergido por los matices con la guitarra de acompañamiento y las palmas de la gente. Lichi tiene algo en la simpleza de como sale al tocar, su ya tan característica gorra rosa, una remera y una bermuda, al revés que la música que toca que siempre busca ir más allá de los sonidos.
A esta pulsión de momentos se suma Manu Torres en “Legendario”. Luego, siguen con “Psicodelia”, donde las emociones chocan con lo cotidiano se hace presente: “Voy a intentar haciéndolo distinto / me quise acordar, pero siempre me olvido / que voy tropezando con todo / uh, no me puedo quejar”. “Un resultado de aventuras con mucha gente, ustedes son la otra mitad”, fueron las primeras palabras de Lichi en Niceto, con saludos para el público. ¡Cocoliche! es su primer LP, luego de mucho tiempo, además de también tener otro tipos de trabajos o ocupaciones desde el lado de la comunicación en su canal de YouTube o como escritor, pero se siente especial cada vez que habla a través de la música.

“¿Existe el Pocodrilo?” desató una de esas fusiones frescas y cálidas de géneros que hacen al disco. Entre risas tímidas pero complacientes, Lichi miró al público agitar con este tema y seguir con “Cuando la barca”y “Las herramientas” y “Portarse bien”: “De tanto intentar / actuar como actúan los demás / se me hizo un lío”.
Uno puede decir que detrás de esa psicodelia y aparatosidad se usa para un escudo a la sensibilidad pero no es tan así, la base era esa. La siguiente canción la presentó como una hecha para las amistades mientras subían Benito Cerati y BB Azul para cantar “Soñé que estabas acá, así que vine”. Entre los “Olé, olé olé olé / Lichi, Lichi” y los “Milei Basura / vos sos la dictadura” la noche seguía con “El rey no sabe” y “Hiper hype”, canciones que acompañan hace mucho al artista rafaelino.

Cerca del final, se subieron Meien a tocar la batería, quien fue parte importante en la producción de ¡Cocoliche!, y Lucy Patané para sacudir Niceto con fuerza gracias a “Turbo”. El cierre estuvo a cargo de la canción que lleva el nombre del disco, “Cocoliche”: “Puedo inventar, así nomás / todo lo que quiera ya lo tengo acá / todas las figuras a la vez, ya estoy imaginándolo”.
Luego de celebrar, y como si se tratara de un festival de amigxs, hubo un DJ set del mismo Lichi junto a Benito Cerati, BB Azul, Lucio y Santiaxis. Mucho de eso retrata lo que es la música, la vida, la compañía que te hacen ser. Aunque uno vaya solo, sabe que no lo está: Lichi y su universo compartido recuerdan que la imaginación también puede ser un refugio colectivo: “Intenté llegar a otro lugar / completamente solo / subir de nivel / es que no se puede esquivar”.