El recinto palermitano fue la pista de baile de Gativideo en una noche que tuvo varias sorpresas
El 20 de junio prometía ser una jornada épica. En el marco de Niceto Club sería desplegado el “Fantástico y maravilloso show de Gativideo”, el recital más grande la banda oriunda de Buenos Aires que combina humor con música funk y disco.
Antes del show, comenzó una introducción con un video narrado por nada más ni nada menos que Peter Capusotto, quien hizo un personaje cruza de presentador de documental con Carl Sagan (Cosmos) en un fondo de selva salvaje.
A continuación, con un look de camisas muy coloridas y la clásica visera de Renzo Montalbano (voz y teclados), la banda subió al escenario mientras sonaba la melodía principal de YMCA, tras la cual hicieron sonar “Disco Majul” poniendo a bailar al público que esperaba entusiasmado. Siguió inmediatamente el melódico “Jazz Jackrabbit”, ambientando el lugar, y “Fantástico bailable” hizo resonar Niceto con sus alegres coros, mezclado con un corto cover del emblemático y popular tema “La isla del sol”, festejado por la gente.
Tras este despliegue, Gativideo abandonó el escenario, dando paso a un video de ellos mismos dirigiéndose al público. “Qué loco que recién estábamos allá y ahora estamos acá, ¿no?”, dijo Ignacio Fishman (guitarra), despertando las risas de la audiencia. Este video fue seguido de un cambio de vestuario a sus características poleras.
Entre tema y tema, volvió a aparecer en escena digital Peter Capusotto, llamándonos a la reflexión sobre “¿Qué es Gativideo?”. Planteó que “Según la teoría popular, se dice que es el producto de un VHS de Luis Miguel mal rebobinado, encontrado en Villa General Mitre por un petiso de dudosa procedencia” y luego él mismo se respondió que “la realidad es que nadie tiene certeza alguna”, pero que “su música nos alegra, nos da ganas de tomar un mate con el abuelo y nos deleita en el día a día”. Finalmente los introdujo nuevamente para a continuar el show refiriéndose a ellos como “Los Paladines del Rock Fiambrín”.
Dicha presentación no podía más que ser augurio de la siguiente sorpresa del recital. Vistiendo un segundo cambio de vestuario, esta vez más rococó, la banda comenzó a sonar junto a Peter Parker en su traje de Hombre Araña. El público reía y se divertía junto a ellos, disfrutando “Vicios de medianoche”.
Otro juego con el público se presentó cuando la banda puso un múltiple choice preguntando cuál sería el próximo tema de la noche, dando como opciones temas como “Carnavalintro” y “Lamento boliviano”. La audiencia estallaba en carcajadas, intercaladas con chistes de los músicos. Para sorpresa de todos, si bien figuraba que harían “Canrnavalintro” de Chano, fue momento de hacer sonar su mayor hit: “Bruce Willis”, desencadenando el festejo y entusiasmo de su gente, que bailó y coreó el tema con ganas. Tal era la emoción que Renzo repitió la primera estrofa en lugar de la segunda, corrigiéndose con “AH RE”, haciendo que el show continúe con la complicidad del público.
A modo de bis, el show culminó con “Flash”, sumando al escenario nuevamente a Spiderman bailando, y coronando lo que fue una verdadera fiesta de recital. Tras su retirada del escenario la gente continuaba aplaudiendo y aclamando por ellos por varios minutos, con lo cual salieron en barra a saludar y despedirse de un modo pintoresco: Renzo con un pucho en la boca y Nacho con una lata de birra que regaló extendiéndose a un miembro del público.
Pero ese no sería el cierre, sino que nuevamente un video apareció, sonando sobre el tema de Almorzando con Mirtha Legrand, y rezando: “Nos veremos la próxima, y si no nos vemos, llamemos al oculista”, dando fin al juego con la audiencia que caracteriza marcadamente a esta banda que empieza a resonar más como una de les grandes artistas de la movida indie.
