Lo que parecía que iba a ser un día perdido por las condiciones climáticas se convirtió en una jornada musical bajo la lluvia que quedará para el recuerdo de todos.
El segundo día del Primavera Sound arrancó, en primer lugar, con un pronóstico climático que no era muy prometedor, sin embargo, la producción del festival decidió hacer cambios de horarios a último momento y de esta manera se logró concretar la jornada. Jornada que comenzó con Juana Molina, la compositora de música electrónica experimental y alternativa que presentó sus canciones con guitarras y bajos y logró hacer vibrar a su público; 107 Faunos también estuvo presente como representantes de la escena local junto a Carolina Durante, la banda española, quienes fueron los primeros artistas en dar la bienvenida al público.
El clima parecía acompañar y se mantuvo así mientras tocaba Santiago Motorizado en el escenario Heineken con un show en el que el cantante de Él Mató A un Policía Motorizado se presentó en su formato solista con banda completa y nos regaló momentos hermosos con una versión acústica de “La noche eterna” y también se dio lugar para interpretar varios covers de bandas de nuestra escena musical como “Jazmín Chino” de 107 Faunos y “Europa” de Las Ligas Menores. Las canciones que pertenecen a la banda sonora de la serie Okupas también se hicieron presentes en el repertorio de Santi, del rock al folklore y del folklore a una balada, así son sus recitales. Su calidez como artista, su voz soñada y todo el sentimiento que le puso a cada tema fueron la combinación perfecta. El artista argento fue el encargado de cerrar la tarde del festival en la que nos permitió disfrutar de una versión hermosa de “El tesoro”, dándole pie a lo que empezaría ser el final de la primera edición del Primavera Sound Argentina.
En simultáneo, el escenario Flow nos deleitó con un show increíble Phoebe Bridgers, la artista estadounidense en su primera visita a nuestro país. Eligió “Motion Sickness”, una de sus canciones más reconocidas para dar inicio a su performance. En el público se vivió un ambiente muy hermoso con muchos sentimientos a flor de piel, los fans ansiaban mucho su presencia en nuestro país y supieron disfrutarlo. Melancolía y felicidad fue lo que más se vivió. La artista logró llegar al corazón de todos y transmitir todo el amor con el que hace su música.
Por otro lado, en el escenario Samsung comenzaba a sonar Interpol. La banda neoyorquina que se hizo presente en el festival con una lista de temas en la que tocaron sus grandes éxitos como “Passenger” y “The New”. La performance fue un despliegue electrizante, con mucho rock acompañado por un cielo nublado que anticipaba lo que sería la lluvia que se estaba haciendo esperar desde el principio.
Empezaba a caer la tarde y la gente ya se preparaba para uno de los momentos más esperados del festival, los Arctic Monkeys, quienes pasaron de estar programados para las 22hs a tocar 19.10hs. La espera, la ansiedad y la lluvia comenzaron a ser protagonistas de lo que iba a ser uno de los recitales más problemáticos, quizás, de la banda británica. La manija por ver a los Monos era tanta que hubo gente que no registraba lo que pasaba a su alrededor y lo que pudo haber sido, desde un principio, un festejo colectivo concluyó con varias pausas por parte de la banda y de la producción del festival para calmar las aguas del público. Fue tanta la preocupación de la banda por el bienestar del público que cambiaron el setlist que venían haciendo en sus presentaciones anteriores por un recital en el que predominaron sus temas más tranquilos pero sin dejar afuera clásicos como “Do I Wanna Know”, “Snap Out of It”, “505”, más una de las estrellas de su último disco, “Body Paint”, que haberla escuchado bajo la lluvia, se convirtió, sin dudas en uno de los mejores momentos del show. La performance de los Monkeys bajo la lluvia fue tan memorable que logró opacar cualquier disconformidad del momento.
Lorde fue la protagonista del cierre del Primavera Sound. La artista neozelandesa lo dio todo, las palabras quedan cortas para describir lo que se vivió en ese show. La lluvia cada vez comenzaba a ser más fuerte y así y todo, el público seguía firme agitando todas las canciones de la artista. “Buzzcut season” fue una de las primeras canciones y el público se mantuvo latente hasta el final. La artista dio lugar para hacer un repaso por sus grandes clásicos de Pure Heroine como “Ribs y “Royals”, o “Green Light”, de Melodrama, que al cantarla y bailarla bajo una lluvia torrencial se convertiría en una postal hermosa del festival. Aun así esta noche se destinó a la performance de su último disco Solar Power. La locura por la artista era total, tanta que nombró varias veces lo asombrada que estaba por el público argentino y lo feliz que la hacía vernos disfrutar de esa manera. La noche finalizó con “Solar Power” seguido de “A World Alone”, momento en el que Lorde, bajó del escenario para saludar. La imagen final es ella, bajo la lluvia siendo una más con el público y compartiendo el final de una noche mágica.
La experiencia del Primavera Sound fue el conjunto de todo lo que conlleva hacer un festival de esta magnitud. Poder disfrutar de tu banda favorita mientras comés algo rico, o tirarte chill en el pasto a disfrutar de música en vivo son situaciones que se pueden dar gracias a acontecimientos como este. A pesar de que bandas como Japanese Breakfast, Beach House, Boy Harsher y Terno Rei no pudieron presentarse debido a las condiciones climáticas y a la decisión de la producción de finalizar el festival alrededor de las 10 de la noche, la primera edición del Primavera Sound en Buenos Aires cumplió las expectativas de un público bastante exigente y supo hacernos felices.
De quién cumplió las expectativas?! Estamos todos re calientes con la organización. Te invito a ver los comentarios en las publicaciones del festival. Y lo Arctic Monkeys de cuarta.