Las ansias que generaron los cuatro singles que la banda bonaerense había adelantado fueron satisfechas y suprimidas con el lanzamiento de su tercer álbum, el cual ya se encuentra disponible en todas las plataformas digitales.
Un viaje en auto, una ruta larga, paradas para descansar, encuentros en el camino y un recorrido motorizado que va a la par de un proceso de introspección. Esta es la propuesta con la que Silvestre y la Naranja nos invita a escuchar Supersticiones, su nuevo disco.
El cuarto LP de la banda bonaerense aborda nuevos sonidos y matices. El soul y el r&b inundan los 35 minutos de duración de este álbum, lo cual ya venía anunciándose desde algunos de los adelantos del disco, como “Debajo de la superficie” y “Supersticiones”. Sus diez canciones de son la síntesis de la exploración sonora, la mezcla de elementos tanto analógicos como digitales, melodías pegadizas y mucho groove. El fortalecimiento del sonido propio de Silvestre y la Naranja, adoptando la limpieza y frontalidad instrumental, se evidencia y acentúa con cada nuevo lanzamiento, distinguiéndose, de esa manera, de las atmósferas sonoras creadas en sus discos anteriores.
Tanto la portada como las visuales realizadas por la banda sugieren el escenario ideal para musicalizar con las diez canciones de este disco, un viaje de ruta. Contraponiéndose a la reproducción en aleatorio o las selecciones de una playlist variadas, se trata de un disco con un relato con comienzo, interludios y final. Si bien las canciones pueden disfrutarse por separado, adquieren un color diferente cuando se escucha como el relato integrado que es. Esta es la manera en la que el conjunto reivindica al “todo” por encima de la “suma de las partes”.
Sin embargo, la oda conceptual del disco se basa en las supersticiones (como lo dice el título, tanto del disco como de su primer tema) advertencias que alguna vez hizo Steve Wonder, tomada como la representación de la creencia en algo que no podemos entender, y que nos encierra en una rutina decorada con una incertidumbre tácita.
Al igual que un viaje, el recorrido sonoro de este lanzamiento recorre varios climas sonoros que transporta a lxs oyentes a distintos escenarios, los cuales se deslizan por el para brizas de un auto en movimiento. El viaje comienza con el tema homónimo del disco, dando riendas sueltas al misterio y la sensualidad de la lírica y una melodía ejecutada por unos falsettos vocales. Sin embargo, el viaje no permite la comodidad del pasajerx, debido a los cambios radicales de climas que hay entre tema y tema. “Amores callejeros”, otro de los adelantos de Supersticiones, pateó el tablero de lo construido hasta el momento, dejando entrar luz, ingenuidad e inocencia a la letra y la voz protagonista de todas sus declaraciones de amor.
La esencia latina aparece como el pájaro de un reloj cucú a lo largo de esta obra. Es el claro ejemplo de “Loca intuición”, canción en la que el estilo de la banda se mezcla con el reggae-pop. Esta fusión genera en un estribillo contundentes, que se convierte en un momento cúlmine del disco al cantar “Sabes convivir con el desorden sin una explicación / estás convencido de tu propia verdad y convicción / podemos soltar y disfrutar de nuestra loca intuición”.
De los momentos eléctricos y eufóricos de Supersticiones, ideales para el goce de la ruta, “Canción para que vuelvas” es el más veloz y groovero. Se le agrega el enorme aporte de Esmeralda Escalante, quien le suma una suavidad armónica a la nostalgia que vocifera la letra de este track. “Luna de fuego” y “Caja de sorpresas”, en donde se destaca una guitarra muy post punk revival, comprenden el mismo ambiente y cumplen la misma función de dinamizar el trayecto.
“La revelación” es el primero de los temas lentos y sombríos del disco, junto a “Debajo de la superficie”. Al escucharlo queda claro que lo incierto tiene su lado oscuro, lo cual genera secuelas en todxs aquellos condenados a existir. Sin embargo, hay tiempo para que todos “liberemos las heridas antes de la revolución”, y de esa manera aprender a vivir con lo incierto tocando la puerta de nuestra casa.
Hay temas, como “Intensidad“, que no necesitan presentación. Fue publicado como adelanto del disco, acompañado por un videoclip y co-protagonizado por Goyo de Bandalos Chinos.
A modo de interludio, “Para Feliza” aparece lista para un fogón en mitad del viaje, el cual es capturado por la noche y es de vital importancia parar para seguir el rumbo cuando la luz vuelva a sonar en nuestros oídos.
Lamentablemente, llegó el momento de bajarse del auto. El disco terminó con “Debajo de la superficie”, habiéndonos llenado de matices, imágenes, secuencias y reflexiones. Cuatro videoclips, un video full álbum y dos colaboraciones acompañan la experiencia de Supersticiones, haciendo que este no sea un disco que pase desapercibido.
Podés escuchar Supersticiones y más de Silvestre y la Naranja en Spotify.
Me encanta lo bien redactada que está la nota. Felicitaciones, Manuel.
Hermoso álbum