Indie Club entrevistó a la banda a tan solo días de la presentación de su disco en La Tangente.
Dharma & Flora suena en el indie desde hace un rato, y sin embargo recién este año lanzaron su primer álbum, Frágil, y pisaron escenarios como Niceto Club. A dos días de la presentación de su disco en La Tangente, este sábado a las 21, estas fueron sus palabras.
¿Cómo se forma “Dharma” y cómo se convierten en “Dharma & Flora”?
Luciano Scattini: Luego de que nuestro bajista y guitarrista salimos a buscar músicos y nos encontramos con Fran Podestá (guitarra) y Manu Fandiño (Bajo). Ahí empezamos a encontrar un lugar más pop, la banda empezó a tener otro sentido, de hecho pasamos a ensayar en Saldías, que fue un paso enorme. Mientras encontrábamos el sonido, nos llegó un mensaje por Instagram de una banda que también se llamaba “Dharma”, diciéndonos que tenían el nombre registrado. En un primer momento nos planteamos comprarles la patente, ya que la gente nos conocía como “Dharma” hacía 1 año. Al final decidimos que no, pero no queríamos cambiar el nombre por lo que decidimos agregarle alguna palabra más. La que más nos gustó fue “Flora” quedando así “Dharma” como la parte más tranqui y psicodélica y “Flora” como lo nuevo con Fran y Manu, que era más conciso. Luego Fran se quedó y Manu se fue hace 1 año. Tener una banda es como tener 4 novias, 5 novias o el integrante. Te tenés que llevar bien con todos, te peleas, tenes que encontrar el punto medio. Llevamos 3 años ya. Dicen que esta la crisis del año y medio, la crisis de los 3 años… por ahora no apareció.
Desde su show en La Tangente con esa formación hasta ahora, ¿qué cambió?
Tomás Iglesias: En su momento estábamos arrancando con nuestro sonido, mentalizándonos en que íbamos a hacer un disco. Teníamos un single que iba a salir solo (“Todo pleno”) pero ahí paramos, y empezamos a pensar más a largo plazo. Era octubre y nos juntamos con Juan Cruz Marino, de Pyura, con quien ya veníamos trabajando, y empezamos a hacer maquetas, ideas. De a poco y con el tiempo las fuimos desarrollando. También pasaron cosas que se vieron plasmadas en el disco, como la ruptura de Lucho con su novia. Llevó tiempo, pero así nació Frágil.
El disco fue como un hijo, me lo tatué.
¿Cómo fue la decisión por hacer un disco conceptual y no armarse de singles?
Lucho: Al principio nos preguntábamos, “che, la gente ya no escucha un disco entero, los artistas sacan más singles”, pero también nos dimos cuenta que álbum es como una carta de presentación. Para mí fue como un hijo, me lo tatué. Es algo que deseaba desde chiquito, no es como una serie de singles. Buscamos, además, que tuviera una historia. No es casualidad que la tapa del disco sea un libro que esté escrito y narrado por nosotros, que hable de desamor, los nombres de los temas tienen capítulos… es un álbum pensado para escuchar de principio a fin.
Tomás: Nos terminó cerrando la idea del disco. Tener cosas por separado pero que se genere algo distinto una vez que se une todo, más macro. Si bien también sacamos singles, nos sirvió para generar hype en la gente en vez de sacar el disco todo de una..
El sonido de Frágil tiene una producción detallada, cercano al synth pop y a la música de los 80s, ¿de donde salen esas influencias?
Tomas: Tenemos un subconsciente colectivo muy grande, desde Michael Jackson, Barry White, Luis Miguel… Las influencias fueron las que tuvimos en ese momento, que es también lo que estás sintiendo como persona, va mutando en el tiempo. De hecho, no creo que el año que viene hagamos lo que estamos haciendo ahora. Nos gusta descubrir cosas nuevas, progresar, estar en esa búsqueda sin fin, flashearla con un artista e ir por ahí.
Lucho: Nos gusta mucho toda esa época, pero actualizada. Quizás las baterías suenan más como ese período, pero de repente se pone mas electrónico, con sintes modernos y el stacatto en las guitarras. El sonido nos fue encontrando, juntamos cosas amigables para el oído. No queremos ser redundantes en lo próximo, esto somos ahora, mañana seremos otra cosa.
¿Entre ustedes mismos se suelen pasar música nueva?
Tomás: Todo el tiempo, de hecho hoy veníamos escuchando trap nacional muy under en playlists raras de Spotify.
¿Creen que pueden llegar a tener alguna influencia del trap?
Lucho: hay algunos temas que tienen esa batería tan típica del trap con los hi hats… pero creo que no va por ahí. Está muy definido el trap, ahora puedo escuchar de todo, fui abriendo al cabeza. Cuando tenia 16 escuchaba Metallica y Megadeth, y criticaba a personas que escuchaban Lady Gaga. Me calentaba, era defensor de esa música. Corte con mi novia durante 1 año y en ese año pase de escuchar Dream Theater a escuchar One Direction. Cuándo volvimos a hablar me dijo “¿Quién sos? ¡Sos otra persona!”.
Tomás: Creo que hay cosas en común, pero es porque el trap, como cualquier subgénero del pop toma prestado de todos lados, entonces siempre te vas encontrar lugares comunes. En nuestro caso es difícil porque el trap viene del hip hop, pero siempre hay algo. Hay que escuchar de todo, animarse y abrir la cabeza.
El indie no se debe encasillar como genero, sino como movimiento
Siguiendo con el tema de los géneros, qué sienten que es el indie? ¿Se sienten adentro de él?
Lucho: El indie para mí es un movimiento escénico, de arte, moda, estilo de vida… Decir que es un género de música es poco. Vas a ver cualquiera festival de indie como La Nueva Generación y vas desde un hip hop hasta un reggae pasando por algo más pesado como Marilina (Bertoldi). Me parece que no se debe encasillar como genero, sino como movimiento.
¿Qué les dejo el Niceto que compartieron con Lucas & the Woods y De la Rivera?
Lucho: Noches sin dormir, previas y posteriores (risas). Me acuerdo cuando estaba en el camarín que no podía llegar a ver cuanta gente había. Primero salieron los chicos y yo salí último al escenario. De la locura que tenía me olvidé de prender el micrófono y canté las dos primeras estrofas con el micrófono apagado. Había mucha gente y se disfrutó muchísimo. Es algo que repetiría todos los días de mi vida.
Tomás: Por suerte veníamos con el rodaje del Niceto de principios de año (NdeR: tocaron el 21 de febrero junto a Silvestre y la Naranja y Un Planeta), por eso lo planteamos de otra manera, más pensado. Ya habíamos sacado el disco, pensamos mucho la lista de temas y el armado del set. Nos quedó algo increíble y por suerte pudimos compartirlo con dos tremendas bandas.
¿Cómo se llevaron con las bandas que los acompañaron?
Lucho: Con Lucas (Engel, cantante de Lucas & The Woods) ya teníamos relación, nos llevamos re bien. A De la Rivera no los conociamos pero pegamos muy buena onda. Pienso que es algo actual, antes era más descontrol y ahora los pibes saben muy bien lo que quieren hacer, son muy prolijos para trabajar, son cooperativos, humildes. Lucas & the Woods es una banda nominada a los Latin Grammy y De la Rivera tiene feats con Emma Horvilleur y Miranda! y sin embargo nos hicieron sentir como si fuéramos una más con ellos. No era la fecha de nadie, era la fecha de los tres. De hecho en la gráfica se habían equivocado, no figurábamos, y Lucas lo solucionó al toque.
Un día vas a ver donde estás parado y vas a decir “Che, llegué hasta acá” y no lo vas a creer.
¿Sienten que esta fecha fue un momento bisagra que los sacó del under?
Tomás: Es algo que se plantea siempre, “es ahora”, “es tal fecha”. Creo que no es así, es un trabajo más progresivo, lleva mucho tiempo y tiempo esfuerzo. Habría que definir qué es under, dónde se pone la vara. Lo importante es seguir y seguir, no hay que bajar los brazos. Un día vas a ver donde estás parado y vas a decir “Che, llegué hasta acá” y no lo vas a creer.
Lucho: Subimos un escalón de una escalera muy larga, no creo que hayamos salido del under under. El año pasado soñábamos con tocar en niceto y lo hicimos a princpio de año, el anterior soñábamos en Roxy y lo hicimos. Ahora soñamos con tocar en los festis que se vienen y esperamos hacerlo. Vas creciendo, lo importante es no conformarse, no creer que es todo eso y listo, disfrutar el momento y el camino.
¿Suelen ir a ver bandas?
Tomás: No piso un boliche hace un año y medio (risas), me muevo por bares y shows, lo disfruto mucho más. Incluso a un bar random donde toque alguien que no tengo idea. Está muy bueno ir a ver a amigos y que se genere esa dinámica de ver como todos vamos creciendo.
Lucho: Hay que bancar la parada de las otras bandas, entender que si queremos pertenecer al movimiento tenemos que estar. No podemos pretender llegar a lo más alto sin saber de que se trata. Nos pasa que salimos de ver un show de alguna banda y decimos “che esto lo quiero hacer yo”, lo podemos mejorar, podemos hacer esto, sacar ideas, te vas nutriendo.
¿Qué tienen planeado para la fecha presentación del disco en La Tangente?
Tomás: Queremos reflejar el disco de la mejor manera posible, aunque haciendo pequeños cambios. Si la pregunta es si va a haber sorpresas, ¡va a haber!
Lucho: Queremos mostrar los sentimientos que van dejando los temas. Si bien es un disco conceptual y tiene una historia, van a haber series de temas que los toquemos en el orden del disco, pero otros no ya que como dijo Tomás hay algunas sorpresas en el medio… Nos la estamos jugando con el show, va a entrar por los oídos y también los ojos. Incluso para el que ya nos vio será un show diferente.
¿Con qué cinco bandas indies compartirían un festival?
Tomás: ¿Hacemos tres y tres? Yo voy con Chita, me encanta su primer EP. También con Lucas & the Woods, tocaria con toda la vida con ellos.
Lucho: De la escena que más me gusta es Bandalos Chinos. Me encantaría que estuvieran los amigos de Pyura, con los que tenemos una relación casi de hermanos. No los conozco pero sumaría a Usted Señalemelo que me encantan. Ya que me quedan cuatro elijo a LMV, que ya están despegando porque son buenísimos.
Dharma & Flora se presentará este sábado 5 de octubre en La Tangente para la presentación de su primer álbum, Frágil. Podés conseguir las entradas desde $ 250 acá.
📷 Pedro Henestroza