El sexteto de Beccar decidió hacer varias paradas en su máquina del tiempo para crear un álbum imperecedero y atemporal con Paranoia pop.
BACH (2018) fue un quiebre en Bandalos Chinos, quienes después de varios EPs que mostraban una nueva esencia, se animaron a crear un disco con toda la dificultad que eso conlleva. Atrás quedaba Bandalos Chinos (2012), el primer trabajo de la banda que tenía influencias progresivas y melodías spinettosas. La ausencia de dicho álbum en las principales plataformas de streaming no hace más que darnos a entender que eso todavía no era Bandalos Chinos.
Con el groove de fines de los 70s y elementos del sophistipop de mediados de los 80s, Bandalos Chinos entrelazó el indie pop actual con baterías secas, colchones de sintetizadores y guitarras puntiagudas. Lanzado de manera independiente, BACH los lanzó al mainstream y les ganó un puesto en importantes festivales argentinso como también les dio la posibilidad de viajar a México, donde tuvieron su propia beatlemanía impensada.
La inusual popularidad en el país norteamericano les hizo comprender la magnitud de lo alcanzado, y los liderados por Gregorio “Goyo” Degano decidieron volcar esta experiencia en Paranoia pop, estrenado el pasado viernes. Algunos músicos no pueden convivir con la fama y terminan dejando su carrera, otros hacen de ella su vida personal mientras un tercer grupo intenta hacerse amigo de la locura para sobrevivir. Bandalos Chinos eligió hacer un álbum con las tres opciones en simultáneo.
Paranoia Pop
La canción que le da nombre al álbum toma aún más valor ya que abre el disco. El funk que podemos encontrar en “Fame” de David Bowie se transporta a las manos de Iñaki Colombo. Además de los guiños musicales, la comparación persiste en la temática casi opuesta: mientras que el inglés advierte sobre las consecuencias de la fama en el individuo, Goyo proclama en sus primeros versos: “Estoy feliz, estoy en TV / Y todes hablan de mí / La verdad, es lo que siempre soñé / Todes viendo mi cara”.
Así como en el hit del Thin White Duke aparece John Lennon en tono jocoso, lo mismo hace LOUTA con su rapeado en el cierre del track homónimo. El flow casi experimental de Jaime James potencia la teatralización del tema y un Goyo premonitorio concluye: “Baby, esta es mi mentira“. El sonido vintage del Sonic Ranch, en Texas (segunda visita de la banda), se amalgama con el viaje temporal que nos espera.
“Sin señal” y “A la cabeza” mantienen el nexo con BACH. La primera, que había sido adelantada como single, explora el “mood Aspen” transitado hace un par de años. La segunda maneja un tempo más rápido y una letras íntima, tarea que les había dejado Adan Jodorowski, productor de Bandalos desde 2018 hasta la actualidad, que buscaba perfeccionarlos en la parte lírica.
El inicio rockero y disonante de “Chu-Chu” confirma el eclecticismo que había prometido el bajista Nicolás del pozo en su entrevista con Indie Club. Con una estrofa rockera y un estribillo entre el twist y el doo wop, “Chu-Chu” es la síntesis los saltos temporales insertados a lo largo de Paranoia pop. Le sigue “La herida”, en donde los Bandalos Chinos se sacan los disfraces y sólo hablan por sí mismos y de sus actuales problemas: las giras, la familia y, finalmente, el amor. Todo se resuelve en una balada épica donde una guitarra que solea a lo Wings le deja el lugar a un cristalino arreglo de cuerdas.
La máquina del tiempo nos lleva más al pasado con “El ídolo“. Esta vez situada en la segunda mitad de los 50s y el principio de los 60s, la historia retratada es la de un líder y su banda, quienes tuvieron su momento de gloria y ahora están de nuevo en la escena. Para completar la historia es menester ver el videoclip dirigido por Tomás Terzano, quien a esta altura ya puede ser confirmado como “el séptimo BaCh”.
Queen y su rock de estadio se hacen presentes en “Mi manera de ser”, el grandilocuente primer corte estrenado el 29 de mayo de este año. La potente batería de Tomás Verduga marca un ritmo simple pero confiado que es seguido por toda la banda. Una armonía clásica tiene su cadencia final en el estribillo donde los coros (gran acierto a lo largo del disco) explotan exultantes.
Como en “Departamento“, el single lanzado previo a Paranoia pop pero que resume Bach, “Mi manera de ser” divaga armónicamente posterior a su segundo estribillo y desemboca de manera orgánica en “AYNMG”, siglas para “Así ya no me gusta”, una frase usada dentro del círculo de la banda para mostrar el desacuerdo con alguna idea musical o personal.
Con la voz de Goyo al frente, este track acústico se manifiesta como protesta y repudio a la violencia: “Si tu idea de paz / tiene palos y gas / tengo que cantar / y ya sé cómo”.
Los instrumentos, comandados por la guitarra acústica, se quedan en un segundo plano acompañando a la voz principal dejando lugar al mensaje.
“Fulnabis”, el primogenio título de álbum, es la joya experimental del disco. Anclado más en lo electrónico, esta canción pro-cannabis se vuelve psicodélica al mezclarse con los arreglos de cuerdas. La potencia se incrementa con cada segundo y así lo hace la tensión, que desaparece en un abrir y cerrar de ojos para dejarle paso al bonus track del disco.
El sucesor de BACH ya estaba terminado, pero al sobrarles tiempo de grabación y encontrarse fortuitamente con la colombiana Tei Shi y el mexicano David Aguilar en el estudio, Adán Jodorowski y compañía decidieron grabar “Los puntos”. Grabado con tan solo un micrófono, las “Los puntos” concluye Paranoia pop mostrando un sonido más crudo, como si el viaje al pasado no hubiera sido sólo una metáfora.
Jodorowski aclara en su Instagram personal que el fade out de la canción es natural: “Los que estaban parados, simplemente se alejaron del micrófono y salieron a otro cuarto mientras @rudyrodmo (Salvador Colombo) estaba tocando el piano. Si hubiésemos podido alejar el piano también, lo hubiéramos hecho”.
Sin dudas, la mejor forma de sobrellevar la fama para Bandalos Chinos es sacarle el jugo a lo malo y a lo bueno para seguir haciendo música. Expandieron el viaje retro que habían hecho en BACH y, con personificaciones, mostraron diferentes realidades de época con el tono pop que los caracteriza.
Podés escuchar Paranoia Pop de Bandalos Chinos a continuación o por Spotify haciendo click acá.